viernes, 12 de abril de 2024

Sed non satiata. Charles Baudelaire (1821-1867)

Extraña diosa bruna, semejante a la noche
Y al aroma mezclado de almizcle y de tabaco.
Obra de algún conjuro, engendro demoníaco,
Calcinada hechicera, ser de la medianoche.


No quiero opio ni sombras ni brebajes: ansío
El vino de tu boca donde el amor es llama.
Hacia ti mis deseos parten en caravana.
Tus ojos son dos pozos en que bebe mi hastío.


En esos grandes ojos que anhela quien te ama,
Oh demonio insaciable, me devora tu llama,
El fuego que robaste al cielo y el infierno.


Si este placer prohibido tiene un castigo eterno,
Es un precio que vale la dicha de tenerte
Y fundir en tu abrazo el amor y la muerte.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario