Soy el hombre agachado detrás de un arbusto
que se sienta a su escritorio.
Jamás me prenderán. Todas mis víctimas
tienen una manera de desaparecer.
No importa que sexo tengas,
serás el próximo.
Te sentarás justo a mí
en un concierto en el bosque.
Si te mirara en el subte,
No desviarías los ojos.
Soy pequeño, engañoso,
como este poema
que ya está dentro de ti.
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